Ya es hora de ver Tarkovsky.
Cuando se habla de cine de autor, hay muchos nombres que siempre salen a relucir, las listas y los criterios pueden variar, pero algo que no cambia es que directores como Tarkovsky siempre se mantienen presentes, esta es mi primera incursión a su filmografía y comienzo con una de sus obras más conocidas "Stalker".
En una rusa deprimente, en color sepia, se nos presenta una familia, un hombre que trabaja como guía a la zona, un lugar custodiado fuertemente, una mujer que reprocha a su marido y una hija que se transforma en una carga, siendo paralitica, el hombre, Stalker, guía a dos individuos hacia la llamada zona, un profesor y un científico que plantearan cuestionamientos y dudas durante todo el viaje, donde el camino nunca es el mismo, se transforma a color, en cuanto nos sumergimos al lugar y se acercan a esta mística locación donde hay una habitación que concede cualquier deseo.
Es una película de un viaje surreal, las imágenes tienen mucho más que contar que lo que los ojos pueden percibir, cada cuadro se siente místico, lleno de una poesía acompañada por el silencio, interrumpido por diálogos en versos y que solo complementan lo extraño y de ensueño de las circunstancias, los personajes se abren y hablan con sus pensamientos y generan interrogantes, convirtiendo todo en un poema visual.
Las imágenes son calmadas, con secuencias largas y sin apuros, hay todo un aire de tranquilidad que me trasmitió la película, aun en los momentos más ajetreados, se apoya en la paciencia del espectador, en donde cada cuadro es importante y agrega a la narrativa, no buscan ser una fiel muestra de la realidad, son un sueño donde la duda persiste sobre su veracidad, nuestros deseos más profundos son explorados, dentro de la frustración de lo presente, la esperanza se transforma en el sentimiento más aferrado. Rayando entre la ciencia ficción y la fantasía, hace equilibrio mientras cuestiona y descose cada personaje y con eso la condición humana, la verdad, la fe.
Una fotografía que se contrasta entre "la zona" y la ciudad, el trio de hombres poseen unos rostros muy expresivos, trasmiten en cámara, en momentos me resulto lenta, pero esto no equivale a aburrida, una cinta con muchas capas y de las cuales solo raspo la superficie, con uno de los finales más desconcertantes y atrapantes que he visto, te sacude y cierra con un broche.
8/10
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