Wong Kar-wai es de los directores por excelencia del cine chino, de sus obras más conocidas en el mundo occidental gracias a la ayuda de Quentin Tarantino, tenemos "Chungking Express".
Una historia de amor en el mundo oriental, "Chungking Express" logra conectar desde el inicio, contando dos historias que componen el film, la transición entre ambas es natural y sucede en el momento correcto, casi como una continuación que solo varían sus protagonistas pero igual se mantiene su hilo temático, el amor, la espera y la superación.
Frenética en su estructura tiene un ritmo acelerado que va muy bien con la estética de la película, llena de colores y cámaras en constante movimiento, los personajes saltan entre momentos de pasividad eternos a agitación sin precedentes, comienza de forma pausada y se transforma llevándonos por estados emocionales muy variados y de forma natural. En la segunda historia usa el recurso de la música de forma repetitiva para representar un tema y un personaje y logra hacerlo sin resultar tedioso, al contrario, hace que la conexión con los personajes sea más fuerte y más intima.
"Chungking Express" y la filmografía de Wong Kar-wai no hacen más que demostrarnos la universalidad de las emociones y sentimientos, de la causalidad, de la coincidencia y de la vida misma.
7/10
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