Después de estar superfumados, enfrentarse al fin del mundo y hacerle una entrevista al dictador norcoerano, Seth Rogen y su "squad" nos traen una película animada, clasificación R, sobre alimentos que hablan. GENIOS.
"Sausage Party" en la superficie es la historia de una salchicha (Seth Rogen) y sus ansias por entrar en un pan (Kristen Wiig) deseo que verán cumplido luego de ser traslado al más allá, cuando sean comprados por los humanos, en el gran supermercado donde viven, todo esto se ve complicado cuando caen de sus carritos de compra y deben volver a sus estantes. Pero la película logra ser profunda y con muchas capas, no teme en generar paralelismos con nuestra situación actual mundial, las etnias son representadas por comidas de la región, el medio oriente, el problema migratorio, todo esto expuesto en un desfile de creatividad y juegos de palabras más que ingeniosos. Para esconder una crítica ruda a la religión y al control que generan en las masas, desestimándolas y cuestionando su lógica que bajo inspección se cae a pedazos.
Cruda y "over the top" no pierde risas por su historia, el diseño de personajes es adecuado y generan una estética cohesiva entre los alimentos, con caracterizaciones lógicas y propias de los productos, cada personaje posee personalidad por sí mismo, logrado gracias al trabajo de voces, con un elenco que reúne a comediantes y actores de calibre, lleno de referencias a otras películas y hechos, destacables el guiño a "Saving Private Ryan" y a películas de terror de los 80. Flaquea en la concepción de un villano innecesario para la historia, pero no le resta al panorama completo del film.
El concepto de Disney "que pasaría si los (llene espacio en blanco) tuvieran vida", con 150 "fuck" de por medio y un clímax que roza el orgasmo alucinante, hacen de "Sausage Party" merecedora de una visita obligatoria.
7/10
0 comentarios:
Publicar un comentario