En anticipación de "Mad Max: Fury Road" me dispuse a ver la segunda parte de esta saga con ya 34 años en su espalda, una película que siempre ha sido nombrada como referente en el género de acción, pero que no había visto. "The Road Warrior" tiene una premisa simple pero muy efectiva, Max interpretado por Mel Gibson, ayuda a una comunidad en un futuro post-apocalíptico a llevar un camión de gasolina, recurso invaluable, a una zona segura, con una historia que va claramente del punto A al B, y sin muchos giros argumentales que mostrar, toda la película se afianza en la acción y lo hace de maravilla. La acción no se hace esperar y desde el inicio nos sacude del asiento con una persecución de autos que funciona muy bien para mostrarnos al tipo de persona que es Max, un hombre que hace lo necesario para sobrevivir, despiadado, pero todavía con vestigios de humanidad y del hombre que una vez fue y el mundo al cual perteneció, no ha perdido toda su humanidad. La película va escalando en grandeza, cada persecución es más grande que la anterior finalizando con una secuencia de casi 20 minutos donde la tensión y el peligro son palpables. "The Road Warrior" está muy bien estructurada, solo que en momentos el ritmo desentona. Es una clase de guion donde la acción mueve la trama y el dialogo es dispensable. Una película que no ha envejecido, sencillamente es acción pura.
7/10
0 comentarios:
Publicar un comentario